Control Interno y Fraude

Lic. Alfredo Enrique Zelaya Mejia
Contador y Auditor
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El control interno en si mismo no es la panacea para los problemas de una empresa en temas de fraude, corrupción o estafa, pero sin embargo lo que hay que reconocer es la importancia que tiene el control interno para minimizar dichos riesgo. Resultaría infantil creer que ninguna empresa, por muy pequeña que fuera, no necesita de un control interno, pero la verdad que la complementación de un control interno no es opcional o negociable para un empresario sensato, ya sea este que tenga muchos años en el mercado o bien vaya incursionando.

El control interno son todas aquellas medidas implementadas por una empresa para reducir sus riesgo en no conseguir sus objetivos en tres grandes categorías: operativos, cumplimiento y financieros. La forma en la que usualmente las empresas implanten su control interno es a través de políticas y procedimientos, sean o no que estén por escrito, pero eso no les quita que sean controles internos, lo que hay que cuestionarnos aquí es:

• ¿son mis controles los mas adecuados?
• ¿que tan cubierto están mis riesgos?
• ¿donde están las puertas abiertas al fraude?

Estas preguntas y muchas mas tendría que reparar para lograr nuestros objetivos empresariales y es aquí donde la intervención un profesional e independiente de la profesión de la contaduría publica toma un momento clave, este es el papel del auditor.

El fin de un auditor con fines de opinar sobre la razonabilidad de cifras no es dar una opinión del control interno, pero sin embargo tiene que evaluarlo para determinar el grado de razonabilidad de las cifras, este auditor no emite un dictamen del control interno, pero esta en el deber de informar a la gerencia las inconsistencias detectadas durante la ejecución de su trabajo profesional e independiente, este es el verdadero valor agregado que un auditor, profesional e independiente, aporta a las empresas.

Lo anterior no pretende presentar el papel del auditor como el héroe o la barita mágica con la arregla todo como por arte magia; muchas veces el curarse de alguna enfermedad o dolencia requiere de sacrificio, dolor, medicinas amargas, etc., y es así, de forma análoga, que las sugerencias propuesta por un auditor a la gerencia y a la administración en general no es muy bien vista y recibidas de primas a primeras.

Si usted es propietario de alguna empresa, negocio, comerciante social o individual, tenga presente siempre algo:

• Busque a un auditor independiente
• Exija que le revise, duela lo que duela, no siempre el querer escuchar lo que queremos no significa que sea lo que necesitamos para mejorar
• Exija cartas de gerencia y seguimiento a los puntos de la misma